Este taratado comercial se firmó en diciembre de 1997, teniendo como uno de sus objetivos estimular la expansión y diversificación del comercio entre las partes y a la vez eliminar las barreras gradualmente para facilitar la circulación de bienes y servicios entre los dos países.
Algo muy importante que toma en cuenta el tratado, especialmente para Nicaragua es que cada parte podrá mantener o adoptar un impuesto o gravamen sobre las exportaciones de ciertos alimentos básicos o sensibles tales como el arroz, carne de pollo, frijol, harina, entre otros, ya que de esta manera se podrá garantizar primero el suministro para la demanda interna y segundo que no afecte a los productores ya sea de una u otra parte ante posible precios bajos.
En cuanto a la desgravación arancelaria de otros productos hay un calendario con una lista donde se clasifican los productos a desgravar por categoría, la categoaría A, donde se encuentran las materias primas e insumos, lo cual me pareció muy bueno dado a que permnitirá importar a menores costos la materia prima y mejorará la competividad de las emporesas. Luego está la categoría B a 5 años, la categoría C a 10 años y la C 15, a 15 años.
Otra cosa muy buena que integra el tratado es que a partir del momento en que los aranceles sobre productos agropecuarios lleguen a 0 , las partes no podrán dar subsisdios a la exportación, evistando así lo que se conoce como distorsiones del comercio.
Hasta el momento Nicaragua sólo ha importado bienes industriales y ha exportado productos tales como carne, maní, lácteos, etc., lo cual ha sido una desventaja ya que ha aportado al deterioro de la balanza comercial por el incremento y contenido de las importaciones; además como en todo tratado comercial se pierden los ingresos fiscales proveniente de la desarancelización de los productos y finalmente nuestras empresas han sido menos competitivas, problema que se resuelve implementando INNOVACION y CREATIVIDAD teniendo la cultura como uno de los aliados, tal y como lo han demostrado algunas pequeñas empresas mexicanas que han sobrevivido y aprovechado los tratados comerciales.