miércoles, 5 de marzo de 2008

Exportaciones no tradicionales: productos orgánicos

Las exportaciones no tradicionales podría decir que son aquellas que se conocen por su reciente comercialización en el contexto internacional. En Nicaragua las exportaciones no tradicionales han venido cobrando importancia e incentivándose desde hace aproximadamente una década, como un intento de diversificar y fortalecer nuestro sistema productivo, el cual históricamente ha sido bastante débil, vulnerable y monótono, caracterizado principalmente por ciclos de monocultivos.

Los resultados han sido muy buenos, las exportaciones de nuestro país se han diversificado, pero claro, todavía falta hacer mayores esfuerzos; según información publicada por APEN, los productos no tradicionales crecieron desde 1990 al 2004, un 397 por ciento, mientras que los tradicionales, un 58 por ciento, por lo que ahora, casi el 50 por ciento de nuestras exportaciones son no tradicionales. Somos el país centroamericano que más ha aumentado porcentualmente sus exportaciones en los últimos 2 años, seguido por Honduras con un 8 por ciento. Somos los que exportamos el 88 por ciento de las hamacas, el 99.8 por ciento del maní y del frijol rojo adzuki, el 41 por ciento de los lácteos, el 53 por ciento de la malanga y el quequisque, el 67 por ciento de la carne bovina y el 50 por ciento de la langosta al resto del mundo. Australia, que hasta ahora compra principalmente café, está empezando a importar con mayor dinamismo maní, ajonjolí, tabaco e incluso artesanías.

A este logro le tenemos que sumar el importante repunte que han tenido ciertos productos no tradicionales de carácter orgánico tales como el café, la flor de jamaica y la miel de abeja que en la actualidad, con el fin de generar un desarrollo sostenible con conservación y preservación del ambiente así como un consumo mas saludable, los productos orgánicos han venido incrementando su demanda, especialmente de países europeos, ventaja que podemos aprovechar con el futuro acuerdo con la Unión Europea dado que esta demanda aun se encuentra insatisfecha y siendo los productos certificados como orgánicos garantizan mejores precios.

Este sector, compuesto por al menos siete mil productores, aporta cada año al Producto Interno Bruto (PIB) unos 16 millones de dólares, Nicaragua es el país en Centroamérica con mayor superficie orgánica, certificada con más de 70 mil hectáreas en rubros como el café, ajonjolí, cacao, banano, plátano, frijol, tubérculos, frutales, pijibay, hortalizas, sorgo, canela, abono, miel, cacao, melón, sandía, algodón y coco, entre otros y exporta su producción orgánica principalmente a los mercados de Europa, Estados Unidos, Canadá y Japón.

Actualmente existe un proyecto equivalente a un millón de dólares facilitados por Austria que estará a cargo del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y el Ministerio Agropecuario y Forestal (Magfor), apoyando principalmente la miel, carne y cacao así como el café y ajonjolí, constituyendo estos políticas y esfuerzos para fomentar la Producción Orgánica en Nicaragua y la diversidicacion de las exporataciones.

1 comentario:

Claudia Odeth dijo...

Definitivamente es necesaria la diversificación de la producción nacional, según tu publicación existe un mercado qatractivo paraestos prodctos,esto es precisamente por ser orgánicos. Nuestros productores de café,mieles y jamaica, a comolo mencionás, están contribuyendo al desarrollo sostenible de la nación al incorporar en su producción prácticas que no degradan los recursos de la naturaleza y que dan como resultado productos más saludables.